El objetivo de este post es desmitificar la primera consulta odontológica del niño, aclarando el período ideal para su realización, como se ejecuta y porque.
La primera visita al odontopediatra debe realizarse antes de que el niño complete su primer año de vida, alrededor de la erupción del primer diente.
¿Por qué?
Permitir que el núcleo familiar establezca hábitos de higiene y de conductas que promuevan la salud bucal. Cuando los hábitos se adquieren adecuadamente tienden a mantenerse. La primera visita es importante para iniciar el seguimiento del establecimiento de las funciones orales y del desarrollo craneofacial del bebé. Además, proporciona la familiaridad del niño con la consulta del odontopediatra.
Directrices
Las directrices básicas se refieren a la enfermedad caries, la higiene oral, la alimentación de transición, los hábitos de succión y la erupción dental. Uno de los grandes enfoques en la primera consulta es la prevención de la caries dental, una de las enfermedades más frecuentes.
Las caries pueden progresar rápidamente en niños de poca edad causando dolor, infección, dañando la alimentación y la calidad de vida. A menudo pueden llevar a la necesidad de tratamiento endodóntico (tratamiento de canal) e incluso extracciones dentales. Inicialmente, la lesión de caries se presenta como una zona desmineralizada en el diente, que se traduce en una mancha blanca. Con diagnóstico precoz, existe la posibilidad de paralizar la progresión de la enfermedad y evitar ese cuadro agudo. La introducción temprana del azúcar en la dieta es uno de los factores causales de la caries precoz en la infancia. La orientación sobre la introducción del azúcar en la dieta del niño debe ser realzada para minimizar el riesgo de caries precoz en la infancia, así como la importancia de los hábitos de higiene oral, que debe iniciarse con el uso de cepillo dental de cerdas suaves y dentífrico con flúor.
Otros de los factores importantes para el crecimiento y el desarrollo de la cara del niño son la masticación y la respiración nasal.
La evolución adecuada de la alimentación complementaria favorece el desarrollo de la función masticatoria. Lo ideal es diagnosticar prematuramente cualquier cambio en la oclusión, masticación y respiración, ya que algunos cambios en la oclusión dental pueden ser corregidos ya a temprana edad, para permitir un masticar equilibrado y crecimiento armonioso de la cara.
La consulta con odontopediatra antes del primer año de vida, favorece la instalación de prácticas preventivas y que promuevan la salud oral. No olvides que la salud oral está directamente asociada con la salud general del niño y la calidad de vida.